El proyecto de Jardín Natural Botánico Jamchen se inicia en el año 2003 después de la adquisición de una finca de regadío enclavada en el municipio de Sedella (Málaga). Un lugar histórico con acequias y bancales construidos de piedra seca por los andalusíes hace más de 500 años y que linda con el actual Parque Natural de Sierra Tejeda y Almijara.
Origen y desarrollo del proyecto Jardín Natural Botánico Jamchen
Según los antiguos lugareños, la finca había sido un lindo vergel lleno de hortalizas y frutales hasta que fue abandonado. Cuando yo llegué, me encontré un paraje semidesértico con un puñado de almendros y olivos supervivientes. Desde entonces, gracias al esfuerzo continuado de reforestación y recuperación de ecosistemas, se ha conseguido generar un bosque espléndido y biodiverso que contiene más de 160 especies de árboles y arbustos, entre silvestres y frutales, y una rica variedad de aromáticas, hortalizas y frutos, tanto de cultivo natural, como de precultivos naturales, así como de sola recolección. Todo ello conviviendo conjunta y armónicamente con un hermoso universo de plantas oriundas, vivaces y perennes, del terreno.
El antiguo almendral fue transformándose poco a poco y los almendros, que llegaron a ser los árboles madre que dieron refugio a los pequeños ejemplares que se fueron incorporando, se hermanaron con ellos, dando lugar, a través de los años, a un precioso espectáculo natural donde conviven muchas clases de plantas, ofreciendo un gran abanico de colores, formas, sonidos, sabores y olores en cada época del año.
Desde los inicios, la finca ha sido, y sigue siendo, un centro representativo de prácticas, desarrollo, investigación y promoción de la Agricultura Natural de Vida Natural Consciente.
El proyecto en la actualidad
El Jardín Natural Botánico Jamchen constituye hoy día un reservorio vegetal muy valioso y de gran importancia desde el punto de vista ecosistemático, científico y cultural. Actualmente es la sede de la Asociación Agricultura Natural España (ANE), ofreciendo acreditación institucional al lugar. En este centro se continúan con los trabajos de investigación y alberga hoy una importante colección de plantas representativas de todos los ecosistemas mediterráneos y continentales, presentes y pasados, dando también oportunidad potencial futura a la memoria histórica que estas montañas del Mar de Alborán tuvieron a través de los millones de años, más allá, incluso, de la formación del Mediterráneo, durante el Terciario, cuando estas tierras conformaban un archipiélago.
La colección
Jardín Natural Botánico Jamchen contiene una de las más importantes colecciones arbóreas de toda la región de la Axarquía, incluyendo géneros y especies difíciles de contemplar en otros lugares de la zona. De entre las muchas especies que acoge, se distinguen representantes de los bosques templados, con sus arctoterciarias frondosas, como el alerce japonés (Larix Kaempferi), el abedul (Betula pendula), el fresno (Fraxinus angustifolia), varias especies de los géneros de sauces (Salix), olmos (Ulmus pumila y minor), cornejos (Cornus mas y sanguinea), serbales (Sorbus aria y domestica), tilos (Tilia cordata y tormentosa), una interesante colección de arces (Acer), una variada colección de robles, encinas y alcornoques (Quercus), etc.
Las coníferas es otro de los puntos fuertes de este lugar, conteniendo un rica variedad de ellas, tanto autóctonas como de distintos lugares del mundo, como son el pino del Himalaya (Pinus wallichiana), el pino rojo europeo (Pinus sylvestris), el pino rojo japonés (Pinus densiflora), el pino de Calabria (Pinus eldarica), el pino carrasco (Pinus halepensis), el pino piñonero (Pinus pinea), el pino resinero (Pinus pinaster), el pino negro japonés (Pinus Thunbergii), el pino negro de montaña (Pinus uncinata), el pino insigne o de Monterrey (Pinus radiata), el pino canario (Pinus canariensis), el pino negral (Pinus nigra subsp salzmanii, calabrica y corsicana), enebros y Sabinas (Juniperus communis, oxycedrus, phoenicea, thurifera), cipreses (Tetraclinis articulata, Cupressus sempervirens, macrocarpa,... ), entre otras especies diversas de coniferofitas.
De entre los árboles autóctonos frondosos, marcescentes y perennes, encontramos en Jardín Natural Botánico Jamchen, aparte de algunos géneros mencionados de Acer y Quercus, donde destacamos el Acer granatensis y los Quercus canariensis, suber, rotundifolia y faginea, así como los nogales (Juglans regia) y los castaños (Castanea sativa) oriundos de estas sierras y otros silvestres autóctonos, una importante colección de perennes y siempreverdes, herederas directas de las laurisilvas, que nacieron en Europa y constituyeron el ecosistema de estas tierras, tipo a los géneros Ilex, Laurus, Viburnum, etc. ; sin olvidar aquellas laurófilas, herederas indirectas de las antiguas selvas europeas, que se adaptaron al clima mediterráneo con veranos secos, como son los géneros Phillyrea, Ligustrum, por mencionar algunos.
Además de una extensa colección de árboles y arbustos frutales cultivados, se destacan también una incipiente, pero importante, introducción de esos géneros y especies pertenecientes al Terciario, muchas veces participantes de estas tierras, dentro de los espléndidos bosques subtropicales que en ese tiempo había en el archipiélago andaluz-africano. Entre ellos se destacan el Cercidiphyllum japonicum, el árbol de Katsura, llamado en Japón, el árbol del hierro (Parrotia persica), la zelkova (Zelkova serrata), un extraordinario árbol terciario de la familia de las ulmáceas, la caoba china (Toona sinensis), tres especies de secuoyas, como la Metasequoia glyptostroboides, la secoya roja (Sequoia sempervirens) y la secoya gigante (Sequoiadendron giganteum), la Cryptomeria japonica, el liquidámbar (Liquidambar styraciflua), la catalpa (Catalpa bignonioides), el kaki silvestre o palosanto (Diospyrus Lotus), un conjunto de árboles pecanos (Caya illionensis), así como un bosquete de cedros que contienen tres tipos de especies, Cedrus deodara, Cedrus atlantica (azul y verde) y Cedrus libani, entre otras muchas especies de esta clase.
Todo el conjunto de plantas conforman un jardín diseñado de forma natural, sin seguir criterios racionalizados y cuadriculados típicos, sino según la intuición y lo que el ecosistema y la naturaleza ha ido informando. Con ello, a pesar de que existe agrupación de espacios temáticos, una buena parte de las especies, que este Jardín Natural Botánico alberga, están repartidas por todo el lugar de manera no estrictamente racionalizada, sino abiertamente intuitiva, configurando un universo múltiple y combinado maravilloso, que eleva altamente el espíritu de todas aquellas personas sensibles y amantes de la naturaleza, incluyendo a aquellos investigadores y estudiosos, que también tienen la oportunidad de complementarse con el gran conocimiento de la botánica.
La Agricultura Natural en Jardín Natural Botánico Jamchen
Este espacio es un lugar de prácticas de la Agricultura Natural (A.N) desde hace más de 20 años y ha constituido la base directa para que haya sido posible la renovación de la misma. Junto a los cuatro principios fukuokianos de no arado, no desherbado, no uso de compost preparados, ni de químicos antiplagas o fertilizantes, en Jardín Natural Botánico Jamchen, fueron incorporados, por vez primera, los otros cuatro nuevos principios de la A.N.:
- La practica del “no hacer” -Principio 5-
- El bosque Natural de alimentos (bNa) -Principio 6-, relativo a un espacio de climax diverso y armónico compuesto conjuntamente de Naturaleza silvestre y cultivada, que da gran importancia la biodiversidad arbórea y de coberturas, donde se conectan todos los elementos, y que sirve de eje fundamental de ese climax Natural.
- Vida Natural Consciente -Principio 7-
- Las transiciones -Principio 8 -
Toda la base del trabajo ha conservado siempre la idea de respeto a la espontaneidad y sabiduría ancestral de la naturaleza con la mínima intervención humana. El objetivo es que sea la propia Naturaleza la que vaya informando sobre sus necesidades hasta conseguir que las propias necesidades y motivaciones humanas, que contienen también toda su ancestralidad, converjan y armonicen mutuamente en una “relativa” auto-sostenibilidad.
En este botánico, hay algunas zonas que ya muestran este climax, sin embargo, debido a la adquisición reciente de nuevas fincas colindantes, que conforma hoy un espacio total de aproximadamente una hectárea y media, existen zonas de trabajo desde el principio de la práctica. Con una adecuada acción, la recuperación y restauración de estos ecosistemas tan degradados no será muy tardía. En estas zonas de transición, donde aún no se conforma bNa maduro, abundan las gramíneas y multitud de especies de secano del tipo a bolinas, lavandas, cantuesos, artemisias, jaras, entre otros muchos y se desbroza todos los años, respetando y manteniendo las plantas valiosas. El manto dorado que cae al suelo lo va nutriendo, ayudando al nuevo bosque naciente y dando resultados asombrosos en pocos años, tal como se hizo en las zonas más antiguas donde ya existe bosque maduro.